La depresión puede afectar a cualquier persona en casi cualquier edad, y las razones por las cuales algunas personas se deprimen no siempre se conocen. Pero, los investigadores sospechan que hay muchas causas de depresión y que no siempre se pueden prevenir.
Conoce más acerca de la Depresión en nuestro artículo ¿QUÉ ES LA DEPRESIÓN?
❤️ Causas de la Depresión
Los estudios han relacionado la depresión con la genética. Pero, los investigadores aún no están seguros de todos los factores de riesgo genéticos para la depresión.
Pero en este momento, la mayoría de los investigadores sospechan que tener padres o hermanos con depresión puede ser un factor de riesgo.
Una de las causas estudiadas de la depresión es el desequilibrio en los neurotransmisores, los cuales están implicados en la regulación de los estados anímicos.
Para que las diferentes áreas del cerebro puedan comunicarse entre ellas, requieren de sustancias químicas (biomoléculas) llamadas neurotransmisores. Cuando algunos de ellos dejan de producirse, es cuando comienzan los síntomas de lo que se denomina como depresión clínica.
Para nadie es un secreto que las mujeres sufren mayores cambios anímicos, incluyendo la depresión, con respecto a los hombres, y esto se debe a las incidencias de variaciones hormonales que se manifiestan dependiendo de la edad fisiológica de la mujer. Definitivamente que los factores de riesgo hormonales tienen mucha culpa al respecto.
Justo cuando las hormonas de las mujeres están en procesos de cambios, momentos como el parto, el período menstrual y la perimenopausia, es cuando pueden estar más propensas a trastornos depresivos
Sin embargo, este riesgo de depresión disminuye considerablemente después de pasar cada cambio hormonal.
Se cree que un tipo de depresión, llamado trastorno afectivo estacional (conocido oficialmente como trastorno depresivo mayor con patrón estacional) es causado por una alteración en el ritmo circadiano normal del cuerpo.
La luz que entra a través de los ojosincide en este ritmo y, en los días más cortos del período de invierno, cuando las personas pueden pasar tiempo restringido al aire libre, dicho ritmo circadiano puede interrumpirse.
Las personas que residen en climas más fríos donde hay días cortos y oscuros pueden estar en mayor riesgo.
Comer mal o no llevar una alimentación balanceada puede favorecer la depresión de varias formas.
Es bien sabido que un desbalance o deficiencias de vitaminas y minerales pueden causar síntomas de depresión, gracias que muchas de estas actúan como cofactores para el buen funcionamiento de los neurotransmisores.
Las dietas bajas en ácidos grasos o con una relación desequilibrada de omega-6 y omega-3 se han podido asociar con mayores tasas de depresión. Igualmente, se ha podido asociar con la depresión las dietas altas en azúcar.
La mente y el cuerpo están claramente vinculados. Si estás experimentando un problema de salud física, también puedes descubrir cambios en tu salud mental.
Las enfermedades pueden estar relacionadas con la depresión de 2 formas.
- El estrés de sufrir de cualquier enfermedad crónica puede llevar a una persona a un episodio de depresión mayor.
- Ciertas enfermedades específicas, como las enfermedades hepáticas, la enfermedad de Addison, los trastornos de la tiroides, etc., pueden originar síntomas de depresión.
Las drogas y el alcohol pueden contribuir a los trastornos depresivos. Pero, incluso algunos medicamentos recetados se han relacionado con la depresión.
Algunos medicamentos que se han encontrado asociados con la depresión incluyen anticonvulsivos, estatinas, estimulantes, benzodiazepinas, corticosteroides y bloqueadores beta.
Es importante que revises cualquier medicamento que te hayan recetado y que hables con tu médico si te sientes deprimido.
Una de las cusas de la depresión también puede deberse a eventos muy estresantes en la vida de una persona, que pueden terminar incapacitándola para enfrentar cualquier situación.
Los investigadores sospechan que los niveles altos de la hormona cortisol, que se segregan durante los períodos de estrés, pueden afectar al neurotransmisor serotonina y contribuir a la depresión.
Tras la pérdida de un ser querido, las personas en duelo experimentan muchos de los mismos síntomas de depresión. Problemas para dormir, falta de apetito y pérdida de placer o interés en las actividades son una respuesta normal a la pérdida.
Se espera que los síntomas del dolor disminuyan con el tiempo. Pero cuando los síntomas empeoran, el dolor puede convertirse en depresión.
Ahora que ya conoces las principales causas de la Depresión, no dudes en ponerte en contacto con nosotros si crees que necesitas ayuda.